Uruguay está buscando promover nuevamente el diálogo en torno al juego en línea
Las autoridades uruguayas han retomado sus iniciativas para fomentar la implementación de regulaciones sobre el juego en línea. Tras transcurrir más de un año y medio desde su aprobación en el Senado, intenta moverlo fuera de la comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados.
Después de algunas semanas de debate, la coalición gobernante está trabajando para desbloquear la propuesta que había quedado estancada. No obstante, ha encarado la oposición y el rechazo incluso de los senadores que previamente habían respaldado la propuesta.
Además de los opositores del Frente Amplio, también han expresado su desacuerdo con la iniciativa los legisladores del Partido Independiente, aliado del oficialismo. De acuerdo a lo que reportó El Observador, el diputado Iván Posada aseguró que su partido opina que el proyecto actual carece de claridad en cuanto a la supervisión de la industria. También, apoyan la idea de implementar una “plataforma integral” que integre a todos los proveedores y genere ganancias para el gobierno.
Según las palabras del medio uruguayo, me vi en la necesidad de insistir para obtener información acerca de quién sería el supervisor. Me informaron que sería la Auditoría Interna de la Nación, lo cual significa que no se llevarán a cabo controles debido a la escasez de recursos.
Ante esta situación, el oficialismo no solo carece del apoyo necesario para avanzar con un dictamen favorable en la comisión, sino que tampoco cuenta con los votos necesarios para su plan alternativo: Aceptar la propuesta directamente en el pleno.
La oposición al enfoque propuesto para el juego en línea en Uruguay
La postura de una “plataforma única” expresada por Posada no es novedosa, sino que refleja la opinión de la Banca de Quinielas del Uruguay, representada por Roberto Palermo, quien previamente ha respaldado el modelo de control monopolístico.
Durante una entrevista con El Observador a finales de 2023, Palermo argumentó a favor de una intervención estatal en este ámbito. Según él, no se puede dejar al libre albedrío del mercado, ya que, en un entorno de competencia, esto podría generar un aumento en los problemas de ludopatía.
Cuando se le preguntó sobre la idea de que el Estado (a través de La Banca) sea el único concesionario del juego en línea, Palermo señaló que no es así, ya que existen más de mil Agentes de Quinielas distribuidos en todo el país, agrupados en 28 Bancas.
Palermo defendió el modelo de control estatal y argumentó que los países con sistemas de monopolio han obtenido los mejores resultados.
“La Banca es un conjunto de empresas uruguayas organizadas para administrar los juegos oficiales de manera segura y responsable, con todos los controles y requisitos del Estado a través de la Dirección Nacional de Loterías y Quinielas. Este es un sistema que ha demostrado ser efectivo para todas las partes involucradas en este sector: el Estado, los clientes y los concesionarios”, afirmó.
“Creemos que la mejor manera de regular los juegos de casino en línea sería a través de una plataforma única, integrada por los concesionarios presenciales”, agregó Palermo. Además, subrayó la importancia de que el juego en línea sea operado por el Estado: “Un modelo sin competencia abierta y pública solo conducirá al aumento de la ludopatía y a una disminución en la recaudación estatal”.
La Banca de Quinielas controla la industria en Uruguay, incluidas las únicas opciones de juego en línea disponibles, que abarcan juegos tradicionales como la lotería, la quiniela y el 5 de Oro, así como una opción de apuestas deportivas bajo la marca Supermatch.